A medida que uno va creciendo las posibilidades de viajar cambian sustancialmente. Uno podría pensar que como el grado de independencia es mayor es más fácil. Sin embargo, a la vez, uno adquiere unas serie de responsabilidades, principalmente laborales, que hacen que ningún viaje sea 99.9% seguro.
Debo aclarar que este párrafo no lo escribo en vano, sino para contextualizar al lector, porque el viaje a CUBA tiene el sentido, el significado y el sentimiento que tiene.
Todo arrancó el día en el que a dos biólogas y una politóloga/filósofa se les metió la idea en la cabeza de ir a explorar la isla de Cuba en dos ruedas (bicicleta)! Como bien dije, ninguna de ellas con profesión de ciclista. Para falta de colmos me les uní yo, que tampoco soy ciclista y de bicicleta se más bien poco. Con decir que hasta me tocó comprar una para ir al viaje porque no tenía y tener previas conversaciones con amigas que si sabían del tema, para no ir hacer una primiparada que entorpeciera el viaje.
De todos los viajes que he hecho es el que más preparación ha tenido por parte del equipo, lo que lo hizo aun mas intenso y pasional. Fue un pre-viaje en el que sólo se comía, se dormía y se respiraba el tema Cuba-Bicicleta!!
Debido a esta adrenalina que se apoderaba de nosotras, elegimos el número 18 para los días que estaríamos recorriendo el país, arrancando el 20 de diciembre y dejando a Colombia en épocas navideñas bajo nuestra ausencia por este grandiosos año que se terminaba. Por cuestiones de la vida (las cuales están explicadas en el párrafo uno), me enfrenté a un imprevisto que me retuvo en la capital colombiana por 4 días, lo que me hacía llegar para la cena de noche buena y encontrarme con mis amigas en una ciudad llamada Viñales, al Sur-Oriente de la isla.
Cualquiera diría, incluyéndome, "eso es muy fácil que Laura se encuentre con las otras 3, hablan antes del 24, le dan las indicaciones de donde se reúnen y listo!" Pero no se debe olvidar que el destino es CUBA, las comunicaciones son mínimas y no era un viaje con itinerarios. Hoy es toda una anécdota, una aventura y si me tocara lo repetiría, pues todo salió perfecto y me encontré a tiempo con el grupo. Por supuesto, después de tener un equipo de logística (unión en los astros) que hizo que todo saliera bien.
Recorrer algún lugar en bicicleta tiene sus más y sus menos, como todo!!! Pero éste especialmente tenía muchos más, en otras palabras, no he encontrado sus menos. Viajar ligero, literalmente viajar sólo con una caja de 1.70mts que contenía la bicicleta, dos mudas completas, tal vez un calzón de más no sobra y un pareo. Y si o si la protección personal, ropa especial de ciclismo, casco, guantes, camel bag, herramientas y botiquín. Pero el mayor placer de esta aventura fue el poder tener absoluto control del ritmo para contemplar!!!
Viajar y conocer un lugar en bicicleta es de las sensaciones más alucinantes que he explorado recientemente (claro que la geografía es más bien plana lo que hace que esta historia la cuente con felicidad y que la recomiende a cualquier no ciclista y ciclista que le guste viajar).
Ahora bien, toda esta aclaración de la bicicleta la hago no sólo por los inolvidables recorridos que hicimos, sino para explicar que desde el día que me decidí aventurar en este viaje únicamente pensaba una y otra vez qué iba hacer para llevar mi cámara fotográfica y los lentes. Primero, decidí llevar la cámara con un solo lente, el que me diera mayor cubrimiento, mi lente predilecto: 28-135mm canon, CUBA es CUBA!!!!
Segundo, y porque CUBA es CUBA, adapté un maletín de fotografía como una tercera alforja que iba en la parte superior de la parrilla de la bicicleta y tenía tres agarres para que no se fuera a caer, ni siquiera con un tornado!!
Este ingenio tuvo ÉXITO en este aspecto y la cámara no se caía por nada en el mundo. Pero no todo fue felicidad, pues la cámara sufrió un inesperado “ALGO” que aún no se que fue y el día 3 del viaje, primer circuito de bicicleta entre paisajes que tengo congelados en mi memoria visual, se obstruyó la conexión entre el lente y la cámara.
Esta es la razón por la que de Cuba no pude "tirar" fotos a mis anchas. Muy relámpagamente podía hacer una que otra en modo retrato o rapidez ambos automáticamente! No tenía control en la cámara, como conclusión 1: fue un viaje de contemplación y de actitud positiva porque es una sensación muy frustrante que se dañe tu objeto más preciado y yo la sentía cada vez que quería parar a disparar y sabia que no podía!
Conclusión 2: las cámara no soportan estos viajes. Para el próximo destino o se mejora el maletín o se lleva una cámara más pequeña!!!
Uno aprende de todo en los viajes, no sólo del lugar!
No mas rodeos: ahora si Cuba!!
Viñales: Los Mojotes
Viñales
Viñales
Viñales
Circuito de Sancti Spiritus-Trinidad
Circuito de Sancti Spiritus-Trinidad
Trinidad
Trinidad
Trinidad
Trinidad
Trinidad
Trinidad
Trinidad
Trinidad
Trinidad
Amanecer: Circuito de Trinidad - Cienfiuegos
Amanecer: Circuito de Trinidad - Cienfiuegos
Circuito de Trinidad - Cienfiuegos
Circuito de Trinidad - Cienfiuegos
Circuito de Trinidad - Cienfiuegos
Circuito de Trinidad - Cienfiuegos
Circuito de Trinidad - Cienfiuegos
Cienfuegos
Cienfuegos
Cienfuegos
Cienfuegos
Habana
Habana
Habana
Habana
Habana
14 días, 4 ciudades, dos monedas, el país de la guayaba, el puerco, el ron, la yuca, el arroz moro, un son cubano congelado en la memoria, miles de personas inolvidables, una cultura autentica y única, un socialismo latente, unos paisajes nunca antes vistos, un barco hundido e impactante pero agradable incomunicación con el mundo externo.
CUBA EL PAÍS EN DONDE TODO ES POSIBLE!!!
Un destino para volver, miles de buenos recuerdos.
Gracias a mis compañeras de viajes (chicas y bicicletas), continúen con ideas "remotas" que ahí estaré siempre que pueda!!!!
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Mi circuito preferido...
Laura Feged R.
